Después de las Extracciones Dentales

Es importante retomar tu rutina dental normal después de 24 horas. Esto debe incluir el cepillado y el uso de hilo dental al menos una vez al día. Esto acelerará la curación y ayudará a mantener la boca fresca y limpia.
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Al cabo de unos días, deberías sentirte bien y poder reanudar tus actividades normales. Si tienes una hemorragia abundante, dolor intenso, hinchazón continua durante 2 o 3 días o una reacción a la medicación, llama a nuestro consultorio inmediatamente.

Después de la extracción del diente, es importante que se forme un coágulo de sangre para detener la hemorragia y comenzar el proceso de curación. Muerde una gasa durante 30-45 minutos inmediatamente después de la cita. Si la hemorragia o la supuración aún persisten, coloca otra gasa y muerde firmemente durante otros 30 minutos. Es posible que tengas que hacer esto varias veces para detener el flujo de sangre.

Después de que se forme el coágulo de sangre, es importante no perturbarlo ni desalojarlo. No te enjuagues enérgicamente, no chupes pajitas, no fumes, no bebas alcohol ni te cepilles los dientes cerca del lugar de la extracción durante 72 horas. Estas actividades pueden desalojar o disolver el coágulo y dificultar el proceso de curación. Limita el ejercicio vigoroso durante las siguientes 24 horas, ya que esto aumenta la presión sanguínea y puede causar más sangrado en la zona de extracción.

Bebe mucho líquido. Evita los líquidos o alimentos calientes. El día de la intervención deben ingerirse alimentos blandos y líquidos. Vuelve a la dieta normal lo antes posible, a menos que se te indique lo contrario.

Deberás empezar a tomar la medicación para el dolor tan pronto como sientas que la anestesia local está desapareciendo. Para el dolor moderado, se pueden tomar uno o dos comprimidos de Tylenol o Tylenol Extra Strength cada 3-4 horas. El ibuprofeno (Advil o Motrin) puede tomarse en lugar de Tylenol. El ibuprofeno comprado sin receta viene en tabletas de 200 mg: se pueden tomar 2-3 tabletas cuatro veces al día, sin exceder los 3200mg diarios para un adulto. Consulta con nuestro consultorio para los menores de 18 años.

En caso de dolor intenso, la medicación prescrita debe tomarse según las indicaciones. No tomes ninguno de los medicamentos anteriores si eres alérgico a ellos, o si tu médico te ha indicado que no los tomes. No conduzcas un automóvil ni trabajes con maquinaria. Evita las bebidas alcohólicas. El dolor o las molestias después de la cirugía deberían remitir cada día más. Si el dolor persiste, puedes requerir atención y debes llamar al consultorio.

Una buena higiene bucal es esencial para una buena curación. La noche de la operación, enjuáguate la boca con agua salada tibia o utiliza el enjuague oral Peridex (si se lo han recetado). El día después de la cirugía, sigue enjuagándote con Peridex dos veces al día; después del desayuno y antes de acostarse. Asegúrate de enjuagarte durante al menos 30 segundos y luego escupirlo. Los enjuagues con agua salada tibia (una cucharadita de sal en una taza de agua tibia) deben utilizarse también al menos 4-5 veces al día, especialmente después de las comidas. Cepíllate los dientes y alrededor de los pilares de cicatrización con mucho cuidado. Al principio, cepilla con suavidad las zonas quirúrgicas.

Es importante retomar tu rutina dental normal después de 24 horas. Esto debe incluir el cepillado y el uso de hilo dental al menos una vez al día. Esto acelerará la curación y ayudará a mantener la boca fresca y limpia.